Para mí tener un bebé recién nacido entre mis brazos es algo que con palabras es difícil de explicar. Cuando eres madre y te ponen por primera vez a tu hijo encima sabes que ese diminuto instante marcará para siempre el resto de tu vida. Cuando sostengo un bebé revivo una y otra vez ese sentimiento tan extraordinario que experimenté con mis hijos y me invade una profunda sensación de bienestar y paz que me podría pasar la mañana entero mirando a ese bebé.

No hay nada más puro que un recién nacido. Su piel, sus deditos, sus pequeñas orejas, su narizita, su olor, su bello…Todo lo que les rodea parece venir de un sueño, verdad? Si estás embarazada disfruta y acaricia tu barriguita tanto como puedas, ese estado pasa muy rápido y tu sueño más deseado está a punto de llegar…

Detén el tiempo y guarda sus primero días de vida, tu amor de hoy se multiplicará por mil el día de mañana!

Probablemente hayas oído que las sesiones newborn se realizan cuando el bebé tiene muy poquitos días de vida. ¿Y por qué es tan importante? Los recién nacidos normalmente duermen muchas horas al día, ya que, una vez salen del vientre de la madre lo que más necesitan para recuperarse y crecer es dormir y comer. Durante los primeros días tienen un sueño muy profundo y es más fácil poder manipularlos sin que se despierten. Además todavía mantienen la posición fetal y podemos ponerlos tan encogiditos como si todavía estuvieran dentro de la madre.

A medida que van pasando los días, toman más consciencia de que están fuera de la barriguita, dejan de tener un sueño tan profundo y poquito a poco van aumentando el numero de horas que pasan despiertos al día.

¿Y qué pasa si realizamos la sesión pasados las 15 días? Pues no pasa absolutamente nada, podemos realizar las fotografías igualmente, lo único que tendremos que tener en cuenta es que el bebé ya no estará tan dormilón y que probablemente habrá algunas «poses» que no podremos realizar, por su seguridad, pero igualmente podremos capturar ese precioso recuerdo que al fin y al cabo es lo importante.

Las sesiones de recién nacido me gusta trabajarlas con mucho mimo y me gusta cuidar hasta el más pequeño de los detalles. Controlar la temperatura de la habitación o recrear el ruido blanco para la relajación del bebé son elementos básicos para crear un ambiente perfecto para realizar este tipo de sesión.

Las sesiones newborn son sesiones largas de entre 2-3h en las que el bebé marcará siempre el ritmo de la sesión y en las que se realizaran fotografías del bebé, con hermanitos si se tienen y de toda la familia.

Me encanta diseñar la composición de los distintos sets e intento crear siempre un escenario que sea único y exclusivo para cada reportaje. Antes de la sesión hablaremos sobre vuestros gustos y así diseñaré una sesión que se ajuste al máximo a vuestras necesidades. Por suerte, casi siempre me dejáis hacer bastante la mía así que yo feliz de poder crear y sorprender en cada reportaje.

Me encantaría poder formar parte de este trocito de vuestra historia y que juntos crearamos el inicio de esta preciosa aventura.